“Desde el río [Jordán] hasta el mar [Mediterráneo]” no es una compadreada de multitud, un envalentonamiento de anonimato, un pecado sin consecuencias mayores de juventud. Ni siquiera es un mero eslogan que se apaga en cuanto la marcha se acaba. Prescribe la “solución” al problema que les plantea la existencia de un estado judío al liderazgo palestino
Decía Jean-François Revel que es en la etapa de investigación, de recopilación de hechos, donde negarse a conocer deviene en censura. Mas El País parece preferir una versión más orwelliana: prescinde de los hechos; elige la supresión, la suplantación, la fabricación y la omisión
Dicen que Oscar Wilde dijo que el hombre es “menos él mismo cuando habla por sí mismo, pero que, con una máscara, dirá la verdad”. Claro que, qué verdad será esa; es difícil saberlo: ¿será la de la máscara o la del rostro que pretende ocultar? Es más, ¿hay verdad posible cuando es preciso tal procedimiento de suplantación o encubrimiento para emplazarla? No parece factible que, de una censura, de un disimulo pueda surgir la veracidad
Aparte del leve lavado a la retórica delatora de la agencia oficial de la Autoridad Palestina, poco más agregaba la agencia española. En realidad, teniendo en cuenta el obvio posicionamiento de la agencia palestina, la española ampliaba la unicidad de la voz (palestina, parte interesada) presentada por la primera
En términos generales, las buenas intenciones de ahondar en el conflicto se veían eclipsadas por una serie de falsos lugares comunes, omisiones trascendentes, por el empleo de cifras sin contrastar, la repetición de mantras anti israelíes y los delirios antisemitas.
¿Cómo se desinforma – o, puesto de otra manera, cómo se borra el límite entre la realidad, los hechos, y los intereses ideológicos de quien relata – pareciendo que se informa? El diario español ofrecía un ejemplo
Atrás quedaron las máscaras. Los fatuos eufemismos. Las formas y los reparos. El periodismo. El antisemitismo sin tapujos, sin complejos: ni nuevo ni redivivo; porque es el que era, porque nunca se fue. Bastaba el masaje de la iteración como método de “confirmación” para habituar a la audiencia y obtener el asentimiento o la apatía
El nombramiento de Sigrid Kaag como responsable al frente del mecanismo de supervisión de la ONU de los envíos humanitarios hacia la Franja de Gaza resulta en una nueva ocasión para evidenciar el "mecanismo" de omisiones de buena parte de los medios de comunicación en español
Una cosa es dar una serie de cifras sin contexto, de declaraciones incompletas, de mezquinas definiciones y silencios varios como si se facilitara un todo; y otra bien distinta es proporcionarle al lector, si no todos, sí aquellos elementos relevantes – desprovistos de ideología, interés, posicionamiento - que permitan comenzar a comprender un asunto dado
Qué medio más sencillo para perpetuar un conflicto que el de utilizar el sistema educativo para moldear las mentes infantiles en creencias estancas, en obediencias sin resquicios, en entregas absolutas. Qué fórmula más cínica que imbuir ese adoctrinamiento con el halo de la ayuda humanitaria, de una peregrina neutralidad ideológica y política