Tras haber informado a France 24 en Español de que estaban haciéndose eco de un bulo, y aportarles la información al respecto, la cadena rectificó su información.
Llamar genocidio a una ofensiva militar —por brutal que sea— sin que se cumplan los requisitos legales e intencionales que definen ese crimen, es una forma de violencia discursiva. Y banalizar el Holocausto al comparar a las víctimas de Gaza con las víctimas del Holocausto no es solo falso: es moralmente obsceno.
CAMERA recuerda al cuerpo de prensa que en 2018 la organización ya documentó que el fotógrafo Hassan Eslaiah era un empleado de Al Quds TV de Hamás, y por lo tanto era un operativo de Hamás, no un periodista.
"La ignorancia es mucho más rápida que la inteligencia - podría añadirse el colaboracionismo -, porque la inteligencia se detiene cada tanto a examinar. En cambio, la ignorancia pasa por sobre las nociones a gran velocidad, y jamás hay algo que le llame la atención. Entonces llega rápido a cualquier parte. Especialmente a las conclusiones". Y vaya si hay ejemplos de esta vertiginosa y tonta – aunque utilitaria - desidia en la cobertura mediática sobre Israel
La televisión pública española invita a alguien que reconoce que no sabe y a quien no le interesa saber, para criminalizar a Israel y para negar hechos objetivos, fomentando así la narrativa del grupo terrorista Hamás.
La vida de los palestinos no vale nada si no sirve a los intereses inmediatos y futuros a Fatah y la OLP que controla. O a Hamás. O a la Yihad Islámica Palestina. O a Irán y Catar que financian el terror
Lo realmente grave es que la lluvia constante de desinformación respecto a Israel que tiene lugar en la mayoría de medios españoles permite que una pieza delirante pase todos los estándares y sea publicada sin levantar una sola alerta en la web de un medio poderoso.
O de peor en peor, más probablemente. De publicar lo que dicte Hamás sin más filtro que el de “periodistas” activistas-propagandistas, a una suerte de maquillaje ideológico y difusión de teorías conspirativas que publicaba El Correo
Exigir a los medios y sus profesionales que se rijan por los parámetros deontológicos que ellos mismos se otorgaron, es esencial para poder abrir el camino a un debate más honesto, más equilibrado y, en última instancia, más útil para la causa de la paz.
Banalización del Holocausto imprescindible para darle una mano al culto genocida Hamás, disimulado-"validado" detrás de las cifras mentidas que sirven a la “periodista” para reafirmar ya no un sesgo evidente, sino su papel cómplice