Investigación preliminar ejército israelí: ningún disparo directo fue dirigido hacia Razan al-Najja ¿Dónde está la cobertura?

El asunto funciona más o menos así. En aquellos sucesos que, en el marco del conflicto árabe-israelí, acontecen en Gaza o están relacionados con la Franja, los medios de comunicación adoptan, por defecto, la “versión” del grupo terrorista Hamás que controla dicho enclave.

Lo hacen citando como fuente al “ministerio de Sanidad de Gaza”. Una forma torpe – aunque la mayoría de lectores caen o se dejan caer en el engaño – de encubrir el hecho de que toman por válidas las afirmaciones o cifras de un grupo terrorista.

Con el caso de la muerte de la paramédica Razan Ashraf al-Najjar, en el marco de las acciones violentas organizadas por Hamás frente a la valla de seguridad entre la Franja e Israel, ha sucedido exactamente eso: la organización terrorista palestina (el “ministerio de Sanidad de Gaza”) culpó al ejército israelí, y los medios lo publicaron como un hecho confirmado, verificado.

Mas, hace tan sólo dos días, el diario Jerusalem Post indicaba que una investigación preliminar del ejército del Estado judío encontró que “al-Najjar no fue blanco de disparos” de militares israelíes. Y explicaba que “durante el incidente se disparó un número reducido de balas, y ningún disparo directo fue dirigido hacia ella”. Cabe aclarar que las fuerzas armadas de dicho país, en contra de lo que pretenden hacer creer los medios de comunicación, no disparan indiscriminadamente; por el contrario, sus soldados deben dar cuenta de los disparos efectuados.

No es que todo esto importe mucho a los medios en español. Es más, los trae sin cuidado. A fin de cuentas, ya han elegido hace mucho su “verdad”, su “relato”, que coincide de manera abrumadora con las afirmaciones de Hamás.

Por lo demás, la investigación sigue en curso. No es que todo esto importe mucho a los medios en español. Es más, los trae sin cuidado. A fin de cuentas, ya han elegido hace mucho su “verdad”, su “relato”, que coincide de manera abrumadora con las afirmaciones de Hamás.

Eso sí, en cuanto Hamás reconoce que la mayoría de muertos en el transcurso de los violentos disturbios eran miembros de dicha organización, estos mismos medios se desentienden de esa confesión y siguen promoviendo aquello de “manifestantes pacíficos”. Lo cual resulta sumamente llamativo. O no tanto…

Y así, entretenidos con la tarea de promover la “versión” dictada por los líderes palestinos, y en censurar aquellas declaraciones que no encajan con esa imagen, los periodistas obvian también lo que cada vez resulta más evidente: que es Irán quien está detrás de estas acciones violentas contra Israel desde Gaza, a través de los grupos que financia: Hamás, Yihad Islámica Palestina.

Está visto que los profesionales no van a la región a dar cuenta de los hechos. Lo hacen, en cambio, con un propósito ya predeterminado: señalar a Israel. En cada crónica. En cada tuit. Obsesivamente, en algunos casos.

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