Una curiosa amistad

Artículo de opinión de Rachel Wolf, pasante de CAMERA

Todos los países tienen al menos un aliado, algunos incluso más de uno, sin embargo a veces parecería como si los Estados Unidos fueran el único aliado de Israel. Esto no es cierto. Hay otro país occidental que se ha mantenido a su lado, en paz, mano a mano. Puede parecer, al ojo inexperto, que Panamá no tiene por qué tener ningún interés en el bienestar de Israel, pero en realidad, Panamá siempre ha tenido una relación muy especial con ese país.

Panamá ha ayudado a Israel desde el inicio. Fue uno de los muchos países que votaron a favor de Resolución 181 de las Naciones Unidas, que estableció el Estado de Israel. Desde entonces, Panamá ha votado generalmente junto a Israel en las Naciones Unidas, incluyendo el voto en contra del reconocimiento del estado palestino el 29 de Noviembre de 2012. Solamente nueve otros países, incluyendo Israel y los EEUU, votaron en contra de la Resolución 67/19.

Algunas personas, como Max Fisher escribió en su artículo del Washington Post, especulan que el voto estaba más vinculado a su relación con los EEUU que con Israel, ya que el Canal de Panamá es clave para las dos economías (tanto la de Panamá como la de EEUU). Pero, Panamá tiene más razones para estar cerca de Israel. Panamá, desafortunamente, ha experimentado el terrorismo de Hezbollah, al igual que Israel. Según el artículo de Los Angeles Times de Tracy Wilkinson, “El día después de que los siete pisos del centro comunitario judíos de Buenos Aires fueran reducidos a escombros el 18 de julio, un terrorista suicida supuestamente libanés que no podía hablar ni español ni inglés, abordó un vuelo de pasajeron en Colón, Panamá, cerca del extremo Atlántico del Canal de Panamá. Cuando detonó la bomba,las 21 personas a bordo murieron, entre ellos 12 hombres de negocios judíos e israelíes, y tres ciudadanos estadounidenses…”

Al principio de su mandato, el presidente panameño Ricardo Martinelli, demostró su lealtad personal y la de su pueblo hacia Israel. En su artículo de 2010 en el Jpost, Greer Fay Cashman exploró la relación entre Panamá e Israel. Según el artículo de Cashman, Martinelli le dijo al presidente Peres: “Panamá siempre estará con Israel, en agradecimiento por ‘la proteccion de la capital del mundo – Jerusalén,’

Este reconocimiento de Jerusalem como la capital de Israel, demostró los sentimientos de Martinelli hacia el Estado de Israel. El artículo de Cashman también revela que “.. tres de los ministros en el gabinete de Martinelli son judíos, al igual que muchos altos funcionarios del gobierno.”

La comunidad Judía de Panamá ha evolucionado desde sus inicios en la década de 1800. Según la Jewish Virtual Library, “Después de la construcción del Canal de Panamá, el censo de 1911 reportó 505 Judios en Panamá.” Este número es significativamente menor que el de los “cerca de 8.000 ciudadanos panameños” de los que Cashman informó en 2010.

El futuro de los judíos de Panamá y su relación con Panamá y con Israel parece muy brillante.

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