Efe: tres días, dos artículos, sin contexto ni versión israelí

En sólo dos días, la agencia de noticias española Efe prescindía de la versión israelí (vale aclarar, que en una de las crónicas se hace una brevísima mención a fuentes gubernamentales israelíes) y de la contextualización. El resultado global: el lector recibía la perspectiva o interpretación palestina sobre puntos centrales del conflicto.

El día 21 de octubre de 2014, la agencia señalaba:

“Las autoridades palestinas denunciaron este lunes ante la ONU ataques por parte de colonos judíos y nuevas ‘provocaciones’ del Gobierno israelí, en lo que consideran un intento por crear mayor inestabilidad en la región.

El mensaje lo trasladó el representante palestino ante la ONU, Riyad Mansur, en cartas remitidas a la Presidencia del Consejo de Seguridad; al secretario general, Ban Ki-moon; y al presidente de la Asamblea General, Sam Kutesa”.

Ni una sola declaración israelí. ¿No tienen nada que decir las autoridades israelíes sobre “las incursiones en Cisjordania”? ¿Qué las motivó?

Por poner sólo un ejemplo, según el Centro Meir Amit de Información sobre Inteligencia y Terrorismo:

El 2 de octubre de 2014 los soldados de la Guardia Fronteriza detuvieron en el cruce Tapuah a dos palestinos de Nablus, de unos veinte años de edad, que despertaron sospechas. En la búsqueda realizada entre sus herramientas se encontraron en poder de ellos, tres artefactos explosivos improvisados, un revólver también improvisado y varios cuchillos. Los palestinos fueron detenidos para ser investigados (Ynet, 2 de octubre de 2014).

El 2 de octubre de 2014 se arrojaron piedras en dirección de un vehículo en el barrio de A – Tur de Jerusalén. Como resultado de esas piedras, resultaron con heridas leves dos chichas, que viajaban en el coche que resultó con daños (Ynet, 2 de octubre de 2014).

El 1 de octubre de 2014 se arrojaron piedras hacia un jardín de infantes judío en Jerusalén Este (Ynet, 1 de octubre de 2014)”.

¿Esto no es relevante en este contexto noticioso?
A la vista de estos hechos, ¿las “incursiones” son “provocaciones”, o más bien son una consecuencias de éstas?

El mismo día, la misma agencia, indicaba:

“El Gobierno jordano ha pedido aclaraciones a Israel sobre un proyecto de ley de la derecha nacionalista para permitir que los judíos puedan rezar en la Explanada de las Mezquitas de Jerusalén, en la que hace 2.000 años estuvo su bíblico Templo.

Según el diario “Haaretz”, el embajador jordano en Tel Aviv, Walid Obeidat, ha cursado una petición al Ministerio de Exteriores israelí pidiendo explicaciones sobre un proyecto del que se han hecho eco varios medios árabes y que supuestamente será presentado al Parlamento (Kneset) el mes que viene. Para Jordania, encargada de la custodia de la Mezquita de Al Aqsa, la aprobación de una ley que permita a los judíos rezar en la explanada donde se alza esta mezquita y el santuario del Domo de la Roca supondría una violación del “statu quo” que impera en los lugares santos, dijo Obeidat.

[…]

Ninguna fuente gubernamental israelí consultada por Efe pudo confirmar esta noche si Netanyahu tiene intenciones de apadrinar el proyecto -iniciativa privada de la diputada de su partido Miri Regev- o si éste iba a llegar al Parlamento en el próximo período de sesiones. Hoy, el embajador jordano ante la Autoridad Nacional Palestina, Khaled Shawabque, se quejó en una entrevista con la agencia Maan de que “Israel trata de anular la custodia de Jordania sobre la Mezquita de Al Aqsa”, la tercera en la jerarquía del islam después de las de la Meca y Medina”.

El proyecto de ley es, como explicaba la agencia, de Miri Regev, del Likud, un partido que podría definirse, más bien, como de centroderecha. Dicha iniciativa fue apoyada inicialmente por Hilik Bar, del partido Laborista, difícilmente definible como “derecha nacionalista”. Y, aun así, esa fue la definición que Efe utilizó.

Pero, ¿por qué los judíos no pueden, o no deben rezar en el Monte del Templo?

Pregunta que se queda sin respuesta.

Por otra parte, ¿eso es todo lo que podía preguntársele a una fuente israelí: si el proyecto llegará a la Knesset o tendrá o no apoyo del Primer Ministro? Una forma de decir que hay versión israelí sin que, en realidad, haya comentario israelí sobre nada.

¿No era pertinente explicar un poco más en profundidad los fundamentos de la iniciativa de la diputada Regev?

O recurrir a algún otro medio israelí para obtener información adicional u otras perspectivas… ¿O acaso sólo existe el Ha’aretz? Un medio cuyos repetidos errores, que, como señalara CAMERA, “virtualmente siempre apuntan en la misma dirección, son los que pueden esperarse de un medio que está comprometido con una agenda política en particular, en contraposición a los postulados periodísticos que dictan imparcialidad y precisión factual”. Un medio en el cual dos de sus periodistas estrella (Amira Hass y Gideon Levy), son activistas anti-israelíes.

Sumado a esto, la agencia no ofrecía contexto alguno sobre el Monte del Templo y su significado religioso – es, como sí apuntaba Efe, el tercer lugar sagrado del islam, luego de La Meca y Medina; pero el más sagrado del judaísmo– e ideológico.

Esto, justamente, ayuda a instalar la negación de los lazos judíos con el Monte del Templo que intenta imponer el liderazgo palestino entre la opinión pública occidental – sumado al libelo sobre la intención israelí de destruir la mezquita de Al-Aqsa.

Ricki Hollander, analista de CAMERA, explica que:

“La negación musulmana de los lazos históricos y religiosos del judaísmo con Jerusalén y el Monte del Templo, la construcción ilegal por parte del Waqf en dicho sitio y la respuesta violenta a las actividades judías allí, durante años, presentan un obstáculo a los esfuerzos de pacificación.

Israel mantiene la seguridad y el control legal sobre el Monte del Templo, en tanto que el Waqf musulmán [y el gobierno de Jordania] tiene el control religioso, económico, administrativo y algo de control de seguridad allí. Negociaciones anteriores se han topado con la negación palestina de cualquier conexión histórica o religiosa y de los derechos judíos al Monte del Templo.

[…]

Ta como documentó el historiador Dr. Yitzhak Reiter en un estudio de 2005 titulado “From Jerusalem to Mecca and Back: The Islamic Consolidation of Jerusalem“, la campaña implica negar la conexión judía en Jerusalén y el Monte del Templo a fin de promover la santidad de Jerusalén, y en particular la al-Aqsa, en el islam contemporáneo. También implica reinventar la historia para crear una conexión árabe con Jerusalén árabe anterior a la judía”.

Al día siguiente, el 22 de octubre, la agencia informaba que:

“La Unión Europea expondrá a Israel sus “líneas rojas” sobre la ocupación de Cisjordania y Jerusalén Este con el fin de preservar la solución de dos Estados, amenazada por recientes decisiones que rompen la continuidad del territorio palestino.

Según un documento interno europeo del que da cuenta hoy en exclusiva el diario Haaretz, la intención de los Veintiocho es aclarar al Gobierno que preside el primer ministro, Benjamín Netanyahu, que la UE no tolerará ciertas decisiones israelíes que hagan peligrar esa solución…”.

Siendo la Unión Europea firmante en calidad de testigo de los Acuerdos de Oslo, y siendo los estados que la conforman, miembros de la ONU, ¿no era pertinente mencionar, a modo de contextualización que dichos Acuerdos dicen en su Preámbulo que el mismo es “es parte integrante de todo el proceso de paz y que las negociaciones sobre el estatuto permanente… darán lugar a la aplicación de la Resolución 242 del Consejo de Seguridad y la 338”?

¿Y que además, “el acuerdo de paz alcanzado por Israel y los palestinos en Oslo, junto con el Acuerdo Provisional de 1995, permiten el crecimiento de los asentamientos así como el crecimiento – y la creación – de comunidades palestinas en los territorios disputados (Jeffrey S. Helmreich, Diplomatic and Legal Aspects of the Settlement Issue)?

¿La Unión Europea puede violar las resoluciones 242 y 338 y un acuerdo del que, además, fungió de testigo?

¿No era una pregunta relevante para los funcionarios de exteriores de la UE?

¿Qué implicancias tiene en el Derecho Internacional que el testigo de un acuerdo internacional lo ignore?

Y, ¿qué “líneas rojas” tiene la Unión Europea para la parte palestina respecto, por ejemplo, a la incitación al odio y la glorificación de la violencia; la negación del derecho de Israel a existir, la existencia de “brazos armados” como el Fatah, y los incidentes violentos protagonizados por palestinos en Cisjordania e Israel como obstáculos para la paz? ¿Existe alguna “línea roja” para la construcción palestina en zonas en disputa – o en aquellas en las que en un acuerdo final se estima que pasarán a formar parte de Israel?

¿Estas preguntas no eran pertinentes, si la preocupación de la UE es la paz?

¿O Efe estima que el conflicto es unilateral: es decir, tiene un culpable?

Si uno abordara el conflicto palestino-israelí sin saber absolutamente nada, sin tener posicionamiento alguno, y leyera estas tres crónicas, uno concluiría:

1. El conflicto es el más importante de cuantos hay en el mundo: tres crónicas en dos días…

2. Israel es un/el país agresor

3. Los palestinos tienen razón

Pero, ¿eso dicen los hechos?


Comments are closed.