Sorprende leer en un medio especializado en Seguridad y Defensa un artículo precisamente sobre un sistema de “seguridad y defensa” con un acercamiento más cercano a la militancia que a la realidad.
No es una sorpresa leer artículos marcadamente anti-israelíes por parte del corresponsal de Público, pero sin duda García Gascón ha cruzado el límite con un artículo plagado de errores históricos, en el que su pluma parece justificar los ataques terroristas contra Israel.
Cualquier petición palestina ante las Naciones Unidas para obtener el reconocimiento de su Estado, o una declaración unilateral , constituiría una grave violación de los acuerdos firmados con Israel y pondría en duda el valor de los compromisos palestinos futuros.
Las medias verdades de Saeb Erekat, su manipulación de los datos y sus ocultaciones pueden encontrar el siempre cálido refugio de medios como El País, a pesar de que la realidad en el terreno y los hechos históricos desmienten su discurso.
El artículo pone la verdad de cabeza. Lejos de “perder terreno”, durante los treinta años que siguieron a la reunificación de la ciudad (1967 a 1997), la construcción por parte de árabes en Jerusalén superó a la de los judíos.