La ONG, envuelta en un halo prestigio pasado y largamente agotado, está abocada a la deslegitimación del estado judío. Cuenta, para ello, con activistas como empleados y con la inestimable difusión acrítica de los medios de comunicación
Mucho se dijo desde los medios en español sobre la designación, de seis organizaciones no gubernamentales palestinas como terroristas por estar vinculadas al FPLP. Mucho, sí, pero con poca o ninguna sustancia, más allá de las insinuaciones habituales, las opiniones sin argumento
La agencia española invitaba así a volver sobre explicaciones, criterios y hechos históricos que muchos medios en español prefieren evitar, en favor de una “narrativa” partidista, simplista, falaz y victimista del conflicto
La agencia española se apoya fundamentalmente en la “información” facilitada por Wafa, la agencia oficial de la Autoridad Palestina; con lo que, aquello que esta autoridad suprima o tergiverse, será ignorado o erróneamente comprendido por la audiencia en español
Ejerciendo cada defecto del periodismo, cada vicio del activismo, traducía y difundía un informe de la politizada B'Tselem, ONG seriamente criticada “debido sus tergiversaciones del derecho internacional, la inexactitud de sus investigaciones y sus estadísticas sesgadas”
Las omisiones tienen el poder de transformar hechos, de darles un significado completamente distinto. Silenciando datos relevantes, el producto resulta ser algo meramente parecido a la información
Casi no importa el asunto que tenga a Israel como protagonista, el medio parece publicar prácticamente el mismo artículo: un poco de ideología, otro de distorsión y altas dosis de omisión, todo reducido a una salsa “informativa” aguachenta, escasa y parcial
La benevolente hipótesis de considerar que el desconocimiento es un elemento central en la crónica del medio español es incapaz de sostenerse ante la perseverancia en la abierta adhesión al léxico del grupo terrorista Hamás