Corrupción en la Autoridad Palestina: pobre cobertura, pobres palestinos

Salvo la agencia española de noticias Efe – de la que se hicieron eco los diarios La Vanguardia y El Confidencial -, no fue posible encontrar la noticia de los aumentos salariales secretos, y aprobados por Mahmoud Abbas, para los ministros de la Autoridad Palestina en 2015 (de casi el 70%) y 2017 (del 67%) violando una ley del año 2004 que fija los salarios de los ministros.

Según un documento filtrado a la prensa, los salarios pasaron de3.000 a 5.000 dólares (6.000 en el caso del Primer Ministro).

Pero no sólo de aumentos salariales iba la cosa. También se aprobaron varias bonificaciones para los ministros, incluyendo el pago de 10.000 dólares anuales para alquilar una casa para aquellos que no residan en Ramallah, donde se encuentra la sede de la mencionada Autoridad.

El asunto no terminaba ahí. De acuerdo a la agencia de noticias Associated Press, el gobierno palestino infló el tipo de cambio, dándoles una prima de aproximadamente el 17% al convertir los salarios en shekels israelíes. Los miembros del gabinete ya disfrutaban de compensaciones por los chóferes personales y los gastos de viajes internacionales.

De acuerdo a esta agencia, “los documentos filtrados ofrecen un vistazo poco común dentro del funcionamiento del gobierno palestino plagado de corrupción, encendiendo conversaciones sobre qué más podría estar escondiendo el gobierno”.

El evidente malestar de los ciudadanos palestinos con sus dirigentes debido a la corrupción endémica en la Autoridad Palestina no es nuevo ni mucho menos, aunque no pocos medios de comunicación se desayunen recién ahora. Y que el conflicto con Israel es la cobertura ideal para que los medios ignoren, disculpen y blanqueen los manejos de los líderes, está más que claro. El estado no parece ser una prioridad – después de todo, cada vez que estuvieron cerca de concretarlo, evitaron hacerlo. La “causa palestina”, para su liderazgo no parece ser otra cosa que la “causa de su enriquecimiento e impunidad”.

Mientras tanto, la mayoría de medios en español optó por ignorar la noticia. En definitiva, la corrupción de los líderes palestinos, los arrestos arbitrarios, la ausencia de democracia; en definitiva, todo lo que no pueda ser imputado a Israel, es acallado por la gran mayoría de medios o cubierto tan pobre y brevemente que, lo que es norma, pasa desapercibido como mera anécdota.

Y es que, para los medios la “causa palestina” no parece ser otra cosa que la oportunidad de señalar a Israel.

¿Y los palestinos? Bien, gracias.

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